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Cintura de locura tras una abdominoplastia

La abdominoplastia es una cirugía muy solicitada en el mundo de la medicina estética por ser una alternativa capaz de acercarles a los pacientes la posibilidad de lucir ese abdomen plano que tanto anhelan.

Si bien tener una cintura pequeña y un abdomen definido es de gran atractivo y mejora el aspecto de la figura, lograrlo no es cosa fácil. Para la mayoría de las personas esta zona suele ser muy problemática por su propensión a la acumulación de grasa, lo cual genera inseguridades e incomodidades en aspectos de la vida cotidiana tan sencillos como lucir ropa ajustada, usar bañador en la playa o sentarse sin que sea notorio el problema.

Pese a que una buena alimentación y ejercicio físico forman la receta básica para la pérdida de peso, no siempre son suficientes para mejorar el aspecto del abdomen. La pérdida masiva de peso, así como la expansión de la piel en el embarazo, en algunos casos dejan como resultado un abdomen flácido que ya no puede ser tonificado con el ejercicio, por lo que hay que recurrir a medidas mayores.

¿Qué es abdominoplastia?

La abdominoplastia es un procedimiento complejo de reconstrucción de la pared abdominal, durante la que se elimina ese exceso de piel y grasa para modelar el abdomen medio y bajo, la cintura y la forma del tronco. Uno de los principales aspectos que hay que tener en cuenta al momento de considerar la abdominoplastia es que ésta no es una cirugía para todo tipo de pacientes ni un procedimiento para la pérdida de peso.

Al igual que la liposucción, esta técnica es de tipo moldeadora del contorno corporal. Por este motivo, los candidatos ideales para este procedimiento suelen ser personas que solían ser obesas y que, luego de una pérdida masiva de peso, quedaron con exceso de piel flácida y colgante; también es común que la soliciten mujeres cuya piel abdominal tiene estrías y no logró a contraerse después de uno o múltiples embarazos.

Procedimiento de la abdominoplastia

La abdomiplastia es un procedimiento quirúrgico complejo que amerita anestesia general y en la mayoría de los casos hospitalización al menos por 24 horas. Este procedimiento comprende diversas técnicas, dependiendo de cada caso su aplicación. En general, el procedimiento puede durar entre tres y cuatro horas: se realiza una incisión transversal en el pubis y por el pliegue abdominal inferior. Luego se separa la piel y la grasa de la pared abdominal y se elimina el exceso de piel y grasa. Posteriormente se define el contorno y se devuelve la tonicidad del abdomen con puntos en los músculos rectos del mismo. Por último, se sutura la piel en la parte baja del abdomen y alrededor del ombligo y se dejan tubos de drenaje para evitar la acumulación de fluidos.

El proceso post operatorio y de recuperación tras una abdominoplastia requiere de paciencia para alcanzar resultados óptimos. Los primeros tres días se debe reposar de forma moderada, caminando cuidadosamente y con buena postura a pesar de la inflamación que pueda sentirse. También se debe usar una faja post operatoria que ayudará a la contención de los tejidos, así como a las molestias e hinchazón. Los dolores suelen ser manejados con analgésicos.

Los drenajes suelen ser retirados unos cuatro días tras la operación y los puntos entre diez y quince días, dependiendo de la cicatrización del paciente. La mayoría de los pacientes suele reincorporarse a su rutina dos o tres semanas después del procedimiento, pero con ciertos cuidados y evitando levantar peso.

Una abdominoplastia es un proceso seguro, siempre y cuando sean tomadas las medidas necesarias y sea realizada por profesionales capacitados. Sin embargo, como en todo procedimiento quirúrgico, pueden presentarse complicaciones durante su realización así como en el post operatorio, tales como: hematomas, infección en las heridas o sangrado, entre otras.

Una marca que embellece

Una de las preocupaciones más comunes entre los pacientes es la cicatriz que puede dejar este tipo de operación y la magnitud de la misma. La abdominoplastia es un procedimiento que inevitablemente deja cicatriz, pero ésta es muy discreta y fácilmente disimulable debido a que queda en el pubis o área del bikini, como las cicatrices de cesáreas. Esto dependerá, claro está, de la anatomía del paciente y las habilidades del cirujano.

La evolución de la cicatriz es como la de cualquier otra. Los primeros meses lucirá enrojecida y un poco inflamada, pero al cabo de unos seis meses comenzará a aplanarse y aclararse. En la mayoría de los pacientes, al año es ya poco visible. En comparación con el excedente de piel, una cicatriz de este tipo es sencilla de ocultar.

Para aquellas personas que han pasado por cambios drásticos en su cuerpo, la abdominoplastia es una alternativa que ayuda a lograr una figura armónica y saludable. Para resultados óptimos puede combinarse con otros procedimientos para moldear el contorno corporal, como la liposucción. El resultado obtenido les ofrecerá ese cambio radical esperado y una mejoría en su aspecto físico que se verá reflejada en autoestima.